Es difícil entender y creer que tu gato se pueda estresar, pues los mininos tienen fama de vivir relajados. Sin embargo, esta característica los hace más vulnerables y sensibles a los cambios de rutina, de entorno, de comida, etc. Por eso es importante preguntarse si mi gato esta estresado para detectarlo y tratarlo.

Que es el estrés

Es la respuesta física ante determinados estímulos, situaciones o cambios vividos en un momento determinado. En realidad, se trata de un mecanismo de defensa o de una respuesta adaptativa que permite la supervivencia ante situaciones que cualquier animal considera de peligro.

 Si dichas situaciones son agobiantes, se habla de un estrés negativo que puede generar cambios en el comportamiento, incluso trastornos graves en quien lo padece.

Causas más comunes de estrés en los gatos

Hay causas internas y externas, las internas básicamente se presentan como consecuencia de las enfermedades o patologías que tiene el gato, las externas obedecen esencialmente a alteraciones de su entorno. Algunas situaciones externas estresantes son:

El Arenero. Para los gatos el arenero es muy importante, es preciso que esté siempre limpio bien cuidado y en lugar aislado. De lo contrario el gato va a tener una sensación de miedo y estrés.

Otra mascota. Los gatos tienden a ser territoriales; en consecuencia, la llegada de nuevas mascotas a la familia los hace sentir amenazados, por lo que es necesario ayudarle con un proceso de adaptación.

Otras personas. Las visitas de desconocidos o la llegada de un bebe a la familia les puede generar estrés.

Castigos. Los felinos responden muy bien a los refuerzos positivos cundo se intenta modificar su comportamiento, en cambio los castigos le generan miedo y por consiguiente un alto nivel estrés.

Mudanzas, cambios de rutina de la familia, obras en la vivienda o cambios de mobiliario.  A causa de estos puede haber un cambio abrupto en su entorno que les puede causar estrés.

Viajes. La ausencia prolongada de los propietarios le puede generar una sensación de abandono. Cuando se viaja en auto con el gato, generalmente les causa ansiedad.

Sonidos de la actividad humana, pueden existir ruidos rutinarios y prolongados en el hogar que estresen tu gato.

Ruidos externos al hogar. Como tormentas, tráfico vehicular, pólvora, entre otros.

¿Está estresado tu Gato? Cómo detectarlo y tratarlo

Qué hacer

No todos los gatos se estresan por las mismas causas ni de la misma manera, esto depende del nivel de exposición a las situaciones generadoras de estrés y a las características, vulnerabilidad y grado de sensibilidad de cada gato. Adicionalmente la mayoría de gatos controlan bastante bien el estrés y apenas les dura unos días o incluso horas. Sin embargo, una vez identifiquemos los síntomas, la primera recomendación es acudir a un profesional que nos pueda indicar el tratamiento a seguir, que puede consistir desde un simple cambio de hábitos hasta un tratamiento con prescripción.

En este último, habitualmente se utilizan: Feromonas DAP, estas imitan las hormonas de la madre en estado de lactancia, buscando tranquilizarlos; en otros casos de medicación, para tranquilizarlos se les suministran fármacos que reducen el nivel de ansiedad y de estrés.

Los síntomas

Tenemos que ser muy observadores y prestar atención a los cambios de conducta, pues normalmente el estrés se manifiesta de una o varias de las siguientes maneras en un gato:

  • Cambia su carácter, se vuelve agresivo, arisco, huye, se esconde, muerde, se le eriza el pelo del lomo mucho más de lo normal.
  • Muestra un comportamiento defensivo.
  • Desarrolla nuevas fobias.
  • Muestra conductas compulsivas como lamerse en exceso.
  • Ingiere objetos no habituales como papel, tela, etc.
  • Sufre de trastornos alimenticios como pérdida de apetito, comer compulsivamente, vomito, etc.
  • Araña muebles u otros enseres.
  • Maúlla en exceso.
  • Se queda inmóvil.
  • Juega menos de lo habitual.
  • No quiere relacionarse con las personas
  • Marca su territorio. Es decir, hace sus necesidades fuera de la bandeja de arena.
  • Muestra tendencia a aislarse.
  • Evidencia falta de curiosidad.
  • También puede llegar a desarrollar enfermedades asociadas. En momentos de estrés se liberan múltiples hormonas que interfieren en el correcto funcionamiento de su sistema inmunológico, por lo que puede contraer patologías autoinmunes.
¿Está estresado tu Gato? Cómo detectarlo y tratarlo

Recomendaciones

Cuando entendemos el origen del estrés en nuestro gato, podemos y debemos esforzarnos en satisfacer sus necesidades.

Facilítale a tu gato un ambiente relajado y cariñoso. Evita invadir su espacio y permítele momentos de descanso. Los gatos deben tener un lugar propio  al que puedan aislarse, jugar y que posibilite un correcto posicionamiento de la caja para hacer sus necesidades

Si está siendo hiperactivo, ayúdalo a canalizar su energía en actividades que le gustan e incentívalo en su gimnasio rascador, esto le ayuda mucho, siempre respetando sus ritmos.

El bienestar de tu gato empieza por una buena alimentación, procura que la comida sea acorde a sus necesidades y de buena calidad.

Los gatos perciben los problemas y las sensaciones de sus dueños, así que la solución puede estar en mejorar tu estado de ánimo.

Debes evitar alzarlo o trasladarlo en tus brazos de forma forzosa y educa a los niños para que respeten el descanso del gato.

Evita “discriminarlo” si recibes un niño o un bebé en casa.

En general, debes intentar usar siempre un acercamiento paulatino a los cambios y acciones que puedan ser desagradables para tu gato. Evita los castigos y regaños, usa la gratificación y el premio cuando se muestre tranquilo.

¿Está estresado tu Gato? Cómo detectarlo y tratarlo

El Señor Agro